Berlín en 4 días.
Berlín, capital de Alemania, y uno de los dieciséis estados federados alemanes, es una metrópoli viva en la que convergen muchas culturas diferentes, y una ciudad que atrae, fascina y sorprende en todas sus facetas.
Llevábamos tiempo con ganas de visitar esta artística y cultural ciudad, y por fin, unos billetes de avión a un precio más que asequible, nos pusieron rumbo a Berlín.
Nuestro avión aterrizó en el aeropuerto de Schönefeld, a unos 20 kilómetros del centro. A apenas unos metros del aeropuerto se encuentra la estación de Banhof Zoo, desde la que cogimos el Airport Express, que en 30 minutos nos llevó directos a Alexanderplatz.
Como apunte comentar que en todas las estaciones de metro hay máquinas expendedoras de billetes, y que una vez comprados hay que validarlos (picarlos) en las pequeñas maquinitas en las que marcan la hora para saber la validez del billete. A diferencia de España, no existen tornos o puertas de entrada a los andenes, por lo que picaresca española puede brindaros pensamientos oscuros.
Para moverse bien por la ciudad, algo que realmente nos fue de gran utilidad fue descargarnos el mapa de Berlín en vuestro smartphone, para poder utilizarlo sin conexión a internet.
Nuestra estancia en Berlín fue de 4 días completos, por lo que tuvimos que escoger muy bien qué monumentos y lugares visitaríamos. A continuación os proponemos nuestra selección de las 10 visitas imprescindibles:
1. La Puerta de Brandemburgo
Símbolo de la ciudad de Berlín, y sin duda unos de los monumentos más fotografiados, fue construido en 1789, inspirándose en los modelos griegos.
La parte superior está coronada por una cuadriga de bronce tirada por cuatro caballos, con la Victoria al frente. No olvidéis pasar bajo los arcos de esta puerta.
La Puerta de Brandemburgo se encuentra coronando la plaza de París, plaza que acoge unos de los hoteles más emblemáticos de la ciudad, el Adlon Hotel Kempinski, famoso por alojar a artistas y personalidades de todos los ámbitos. Desde la plaza podréis obtener una de las mejores instantáneas, eso sí, tendréis que sortear los múltiples turistas que se agolpan, así como escabulliros de las múltiples estatuas humanas que se ofrecerán a fotografiarse con vosotros a cambios de unos cuantos euros.
2. El Parlamento - Reichstag
Sede del parlamento Alemán, la entrada al recinto es totalmente gratuita, no obstante es obligatorio reservar de forma anticipada la visita a través de su web.
Tras la subida en ascensor, os entregarán un audio guía en el idioma que escojáis, la cual os proporcionará una visita excepcional. El audio guía está totalmente automatizada por lo que la explicación se irá activando automáticamente en función de la zona del recinto en la que os encontréis.
En el interior de la cúpula podréis deleitaros con una exposición fotográfica a través de la cual se describe la historia del parlamento, pero sin duda, el elemento más espectacular del edificio es la cúpula acristalada, obra de Norman Foster, que se encuentra situada sobre la Sala de Plenos del Parlamento.
3. La catedral de Berlín
Imponente por sus dimensiones destaca sobremanera la cúpula y la escalinata. La entrada al templo es de pago y permite visitar el interior de la catedral, la galería y la cripta. Desde la parte superior de la cúpula, si el grisáceo clima de Berlín os lo permite, podréis obtener una excelente panorámica de la ciudad.
4. La Isla de los Museos - Museumsinsel
La isla, de pequeñas dimensiones y rodeada por el río Spree, fue declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco en 1999, y se accede a ella cruzando el impresionante puente del Castillo, desde Under den Linden.
La isla, concentra alguno de los mejores museos del mundo: el Atles Museum, Neues Museum, Bodemuseum, la Alte Nationalgallerie y el Pergamon Museum. La visita completa os llevará un día entero y existen múltiples combinaciones de entrada para que podáis combinar los museos según os convenga.
5. Under Der Linden
Es la principal avenida del Berlín antiguo y el recorrido a pie de su kilómetro y medio es de paso obligado. La avenida va desde la puerta de Brandemburgo hasta Scholossbrucke (Puente Scholoss).
6. Potsdamer Platz
Espacio rodeado de rascacielos, museos y lugares de ocio. Al norte se levanta el moderno Sony Center, en un rincón del centro comercial se conserva el restaurante de lujo Kaiseraal, sin olvidarse ni perderse la impresionante cúpula de cristal.
7. Alexanderplatz
Uno de los símbolos de la resistencia durante la época comunista, no se puede que decir que esta plaza sea un prototipo de belleza.
En ella se alzan dos emblemas de Berlín, la Torre de televisión y el Reloj de las horas del Mundo, diseño de Erich John. Este reloj circular, en la actualidad punto de encuentro para los berlineses, marca las horas en diferentes partes del mundo.
Cerca de Alexanderplatz encontraréis múltiples locales al más puro estilo alemán en el que recuperar el aliento con una auténtica pinta negra.
8. Schloss Charlottenburg
Palacio perteneciente a la familia Hohenzollen, de estilo barroco, sus dependencias forman un bellísimo recinto que se completa con espléndidos jardines de diseño francés.
9. East-Side Gallery
Situada en Friedrichshain, frente a la estación de trenes de Ostbahnhof y cerca de Oberbambrücke, que hizo las veces, durante el tiempo que duró el Muro, de paso fronterizo, está decorado por diferentes artistas que, en 106 murales, ilustran los 1.300 metros que se conservan del muro original. Merece mucho la pena recorrer este tramo.
10. Gendarmenmark
Considerada una de las plazas más bellas y elegantes de Berlín, se inspira en las plazas italianas renacentistas.
A ambos lados de la plaza se alzan dos iglesias gemelas, la Deutscher Dom, Catedral alemana y de entrada gratuita, y la Französischer Dom, Catedral francesa y de entrada de pago. En el centro de la plaza se alza el Monumento a Schiller, poeta y dramaturgo. En verano encontraréis esta plaza repleta de puestecitos de comida y bebida.
Y si este listado de los 10 imprescindibles a visitar se os hace corto, podéis ampliarlo visitando la Iglesia del Kaiser Guillermo, la Nueva Sinagoga, El Monumento Soviético, Checkpoint Charlie...
Por último, si disponéis de más días, os recomendamos enérgicamente realizar la visita al campo de concentración de Sachsenhausen. Situado a unos 30 kilómetros del centro de Berlín, revivir el holocausto nazi, os llevará una jornada completa.