Gante ciudad medieval.
Gante, capital de la provincia de Flandes Oriental, es una de las ciudades más bonitas de Bélgica. Algunos la equiparan a la bella Brujas y otros incluso dicen que la supera en belleza. Nosotros lo tenemos claro: cómo Brujas ninguna.
Su fantástica Universidad convierte a la ciudad flamenca en una ciudad joven, viva y siempre en movimiento. Al caer la tarde es habitual ver a estudiantes por las orillas de los canales con una rica cerveza. Porque al igual que Brujas, Gante también posee una interesante red de canales, eso sí, algo más limitada.
Gante además cuenta con una situación privilegiada, a medio camino de Brujas y Bruselas (y a media hora de ambas en tren) permite la llegada de locales y turistas a diario con la finalidad de perderse por sus callejuelas y descubrir la arquitectura de esta maravillosa ciudad repleta de rincones con encanto y de un precioso centro urbano medieval.
A Gante merece la pena dedicarle un día entero. A continuación os mostramos el itinerario que nosotros seguimos:
Comenzamos por una de las imágenes más emblemáticas de la ciudad, la Torre del Campanario Belfort, en la que se encuentra la campana Roland con un dragón de oro. Os recomendamos subir hasta arriba, ya sean en ascensor o a pie, para disfrutar de una las mejores vistas de la ciudad.
A escasos metros de la Catedral, y presidiendo la plaza Korenmarkt, encontramos otra de las iglesias que sobresalen en el skyline de Gante, la iglesia de San Nicolás (Sint-Niklaaskerk), considerada la segunda iglesia más bonita de la ciudad. Nosotros tuvimos la mala suerte de encontrarla cerrada por obras por lo que tuvimos que conformarnos con disfrutar de su espectacular fachada desde la plaza Korenmarkt.
Comentar que desde el puente de San Miguel, junto a la iglesia consagrada al mismo santo, podréis tomar una de las mejores instantáneas de la ciudad. ¡Para muestra un botón!
Otra plaza que nos gustó mucho fue la Plaza del Mercado del Viernes (VrijdagMarkt), cerca de la Iglesia de Santiago y del antiguo Barrio Medieval de Parteshol, uno de los más codiciados actualmente en Gante.
Y lo mejor estaba por llegar, el Castillo de Gante (Gravensteen), uno de los edificios más espectaculares de la ciudad y que fuera residencia de los Condes de Flandes utilizado hasta el siglo XIV como fortaleza defensiva y hasta el XVII como prisión. Este castillo se encuentra en perfecto estado y en su interior se puede hacer una visita a la sala de torturas con elementos que se utilizaban. Asimismo alrededor se conserva el foso medieval, y es que este castillo fue un importante elemento de vigilancia.